Ni ella ni yo pensamos disculparnos por nuestras palabras. No se disculpa el sol aunque queme ni la luna aunque en ocasiones aterre. Yo amo, todo aquello que pueda ser amable, y como me rehúso a esconderme, he aquí mi escape.
8 may 2012
Regalame tu alma. Regalame tu ser.
Brindame un poco de la cordura que te falta para poder creer.
Préstame tu ser, tu vida.
Muéstrame eso que me condenaría.
Muy hermoso
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