Ni ella ni yo pensamos disculparnos por nuestras palabras. No se disculpa el sol aunque queme ni la luna aunque en ocasiones aterre. Yo amo, todo aquello que pueda ser amable, y como me rehúso a esconderme, he aquí mi escape.

25 ene 2012

Suponiendo que existas...

Y si empezara otra guerra, donde los demonios tuvieran nombre y apellido, si conquistaran el espacio o el espacio nos conquistara, me da lo mismo. Todo va a estar bien, todo seguirá bien, mientras tu estés, todo estará bien.
¿Será que es tan fácil como lo pinto? Primero tienes que estar tu para que todo esté bien y tu aun no estás.
Tu aun no te dignas a aparecerte frente a mi, y, por mucho que desee verte, me alegra. No me malinterpretes, te deseo, te extraño, te anhelo. Te amo aun sin conocerte. Quizá ese es mi problema, caigo totalmente rendida a tus pies solo de saber que existes, pero aun no te tengo frente a mi. Aun no vivo el segundo en el que debe congelarse el tiempo y en el que mi corazón desbocado sabrá que eres la criatura más peligrosa y apetecible que exista en este mundo. Si me detengo a pensar en ello, si, es conveniente que aun no te tenga. Después de todo, cómo podría mirar el mundo sabiendo lo cerca y lo lejos que estás, lo fácil que sería caer en tus brazos y lo imposible de este hecho. No, aunque me desgarre el no tenerte a mi lado, prefiero no verte aun, que seas una sombra, la neblina del sueño más valioso que existe en mi mundo, en mi ser, el punto de convergencia de mis fantasías y mi realidad. Claro que deseo verte, eres tu quien puede salvarme de mi misma, quien puede hacerme sentir que soy todo lo que puedo llegar a ser, eres tu quien puede curar las miles de llagas que supuran dentro de mi negro y podrido corazón.Pero tu aun no eres una realidad, aun tengo mucho que aprender, mucho que vivir, mucho que escribir y miles de cosas que sentir antes de poder siquiera manejar lo que sé que serás. No, amor mio, aun no eres pero serás.
En el punto en que cruces mi camino las luces destellaran, los planetas se alinearan y el tiempo se detendrá.






O simplemente iremos caminando por la calle cuando nuestras miradas


se trabaran en un eterno duelo de fuerzas. Inclinarás tu cabeza como saludo, sonreiré,


seguirás tu camino y luego, por azar de la vida, nos encontraremos donde menos


pensemos. Hablar será tan fácil como respirar, sentirnos será la única realidad, el brillo de


tus ojos sera mi salvavidas en medio de la soledad. Te harás tan indispensable para mi


como yo lo seré para ti, y tu sonrisa, tu voz, tu aroma, seran mi único y más potente


narcótico.






Claro, todo esto es mera suposición, una forma de darle pistas al destino para el momento


en que cruces mi camino. Para el momento en que sepa que estoy completa y totalmente


arruinada para amar a cualquier otra persona que no seas tu, total y completamente


subyugada a tu existencia para poder respirar, sentir, existir.

1 comentario:

Deja que tus gritos también sean llevados por el viento.