Es estúpido, lo sé, nadie mas que yo sabe lo estúpido e infantil que es esta sensación. Desesperantemente ilógicos y condenadamente destructor. ¿Qué hago? ¿Cómo lo evito? De que forma puedo cambiar lo que siento si ni siquiera logro ordenar mis pensamientos. No tenia valor, no era irreemplazable y mucho menos invaluable, simplemente era mía. En el mundo en que vivo era la única prueba de que el tiempo pasa y que no estoy congelada, era lo único que me permitía creer, aferrarme, a no ser simplemente una niña que ha pasado los últimos años viviendo en el lugar y momento equivocados. Una chiquilla, una simple niña viviendo en un mundo donde todos te miran, bajo la lupa, bajo la critica, siendo el blanco, el objetivo, la diana a la que apuntan todas las flechas asesinas. Lo extraño en mi mundo, en el caos que me consume no es el que yo aun este aquí, no, eso no me sorprende. Lastimosamente soy más fuerte de lo que suelo creer. Lo que me sorprende y extraña es que a pesar de la cantidad de gente que cree que estoy fuera de mi lugar, de mi elemento, que ven en mi solo a otra niñita mimada que no pertenece a su mundo, aun no me hayan sacado. Si yo lo sé, si soy consciente de ello es sorprendente que no sean capaces de decírmelo a la cara.
Lo siento, esto pretendía ser una explicación de como me siento, termino siendo un caos de palabras sin sentido y de torpes desatinos.
Olvídalo, mejor no pongas atención a lo dicho. Simplemente me era necesario sacarlo de mi organismo.
Belle.
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