LEYENDA

Que es el viento, solo una voz sin volumen, pero si abres el corazón, si, por un minuto o mejor todo un día, dejáramos de poner nuestra atención en cosas  vanas, que, al fin y al cabo, no son más que sombras; si nos preocuparamos, no por el qué dirán sino por el que sentiré, la vida seria un jardín. Nadaríamos en un estanque de lirios en medio del cual se alza, imponente y majestuoso, un rosal; un estanque bordeado por un campo de margaritas y girasoles,  donde los pajaros van a cantar, y alegran con sus trinos los refulgentes rayos del astro rey. Donde las prisas y azares de la vida pierden su significado y se convierten en palabras vacias que van a enredarse en las espinas del rosal, para luego desaparecer cuando la luna de plata baña la tierra.  en este jardín, donde el sol canta y la luna baila, el viento ya no es solo una voz sin sonido, aquí se convierte, poco a poco, pasando de un murmullo a un tañido de campanas, se convierte en un canto y a dúo con el sol y dejando danzar a la luna, muestran el camino al corazón humano, un camino que había vivido oculto, hasta el tan esperado momento en que un hombre deje de pensar en cosas vanas y, en vez de oír las sombras, decidiera escuchar la voz del viento que tantas cosas puede enseñarle.